Realizar una exposición oral frente a un grupo amplio de audiencia puede llegar a ser una tarea intimidante y una fuente de ansiedad incluso días antes de llevarla a cabo.
Es importante que sepamos que los buenos oradores no nacen, se hacen. Todos somos capaces de llevar a cabo grandes discursos que lleguen a la audiencia y consigan transmitir eficazmente la información. Para ello, necesitaremos práctica, práctica y más práctica en nuestra expresión oral.
Lo primero de todo es ser conscientes de que mejorar nuestra habilidad de exposición oral es un proceso que dura días, incluso semanas, de esta forma evitaremos frustrarnos en las primeras etapas. Lo segundo, es aprovechar toda oportunidad que se nos presente para hablar en público para practicar.
TIPS ÚTILES
Antes de realizar la exposición oral:
- Contar con al menos una semana de anticipación
Lo ideal para preparar una presentación oral de aproximadamente 45 minutos es dedicar al menos una hora diaria a prepararla durante la semana anterior. Saber que contamos con días de antelación ejercerá un efecto psicológico de relativa calma y seguridad en uno mismo.
- Debemos conocer a la perfección aquello de lo que vamos a hablar
Antes de crear el guion sobre lo que queremos hablar, hay que tener claro que sabemos de qué estamos hablando y que nuestro conocimiento no tiene lagunas.
- Tener clara la idea principal que se quiere transmitir
Es importante no desviarse del tema y expresar directamente en qué consiste durante los primeros 2-3 minutos de la exposición oral.
- Poner en práctica la regla del 10-20-30.
Esta regla creada por Guy Kawasaki implica que, si utilizamos una presentación electrónica para dinamizar la exposición, no debe tener más de 10 diapositivas, 20 minutos de duración, ni menos de 30 puntos en el tamaño de letra empleado
- Elaborar la introducción
Antes de pensar en el guion de la charla, es preferible plantearse los primeros minutos de esta, de tal forma que se llame la atención de la audiencia a la vez que se plantea el tema a tratar en la exposición oral.
- Estructurar la charla
Elaboraremos un guion detallado sobre lo que queremos decir. Esta fase es de especial importancia si aquello que queremos comunicar es relativamente complejo.
- Leer en voz alta
El hecho de conocer el orden y las ideas que se incluyen en nuestro trabajo, nos ayudará a recordar mejor lo que vamos a decir y expresarlo con naturalidad.
Leer en voz alta, oírnos a nosotros mismos hablando, es muy importante, ya que nuestra propia voz será un elemento que hará que el recuerdo sobre el guion sea más completo.
- Descansar bien el día antes
Debemos llegar al día antes de la exposición conociendo bien el guion. De esta forma, solo dedicaremos tiempo a repasar y podremos descansar para que nuestro cuerpo se relaje y recupere. Preparar bien una exposición oral es, también, saber gestionar los tiempos.
Durante la exposición oral:
- Hablar despacio, con tranquilidad y voz clara.
- No comenzar con una diapositiva, sino con una frase introductoria donde nos presentemos, por ejemplo “Buenos días, mi nombre es….., quiero agradecer al comité científico y organizador su invitación para participar en este evento…ahora si vemos la primera diapositiva”. Esto hará que la audiencia fije la atención en nosotros y siga nuestras indicaciones.
- Saber cómo mirar hacia el público: es importante mantener el contacto visual con el público durante la presentación oral para que éste sienta que nos estamos dirigiendo a él. Se pueden realizar barridos de derecha a izquierda y de izquierda a derecha.
- Transmitir seguridad con el cuerpo: con los nervios, es habitual comenzar a moverse demasiado, pero esto es un error, ya que solo servirá para distraer a las personas que te escuchan y hará que parezcamos inseguros. Es mejor permanecer quieto en un mismo sitio, mantener una postura de neutralidad y tener cuidado con los gestos innecesarios de brazos y manos. Un truco para controlar esos gestos “involuntarios” que podemos llegar a realizar a causa de los nervios, es tener un bolígrafo o un pasador de diapositivas en la mano. Con respecto al comportamiento, la indumentaria elegida para la ocasión debe ser la apropiada al medio que pertenece y a usted mismo. La primera impresión es básica.
- Para finalizar nuestra exposición, procuraremos que la última diapositiva sea igual que la primera, donde se pueda leer el título, el autor y los datos de contacto o redes sociales. Asimismo, concluiremos con otra frase como al principio, que demuestre que claramente hemos llegado al final, por ejemplo “con esto doy por finalizada mi exposición, muchas gracias por su atención”. En caso de que haya turno de preguntas o sugerencias, se puede añadir además “quedo a disposición de los asistentes para cualquier pregunta o sugerencia que quieran hacerme al respecto”.
Recomendaciones de libros útiles para preparar exposiciones orales:
- Reynolds, G. (2011). Presentation Zen: Simple ideas on presentation design and delivery. New Riders.
- Kawasaki, G. (2000). El arte de cautivar. Barcelona, Ediciones Gestión.
- Donovan, J. (2012). Método TED para hablar en público. Barcelona: Ariel.
- Carnegie, D. (1995). El Camino Fácil y Rápido Para Hablar Eficazmente/the Quick and Easy Way.
- De las Heras, M. P. (2011). ¿Estás comunicando? (Vol. 2). LID Editorial.
Fuente:
Gattorno, F. L. (2007). ¿Cómo hacer una buena presentación oral? ¿Guía para su realización? Rev. venez. cir, 60(2), 82-87.
Pasillitos de Hospital 